

DÍA NOVENO (30-11)
30-11 Noveno día
Volvemos a cambiar la hora retrasando nuestros relojes una hora mas.
La noche ha sido movidita, con vientos de mas de 30 nudos y olas importantes. Menos mal que Emilio lo vio venir, y en previsión de ello, nos hizo coger un rizo antes de que el viento soplara tan fuerte.
Durante la noche en la que nos cayó algún chubasco sin importancia, nos cruzamos con un velero con el “spinaker” puesto. Esto nos sorprendió ya que las condiciones de viento aconsejaban navegar de una forma mas prudente. Emilio conectó con ello por la radio y se trataba del Amaizing Grace, un velero de unos escaso 12 metros de eslora que navegaba a una considerable velocidad. Luego vimos con la clasificación, que seguramente tuvieron problemas pues se estaban quedando muy atrás.
Por la mañana, amaina un poco el viento, pero no baja de los 22-25 nudos, y lo mejor es que sopla en la dirección adecuada para llevarnos directamente a destino. Esto nos hace recorrer muchas millas.(Al mediodía habremos recorrido 204 millas en las últimas 24 horas. Y parece ser que continuaremos así). Esto nos hace prever una llegada a Santa Lucía durante la mañana del día siete.
Estoy esperando impaciente una llamada de mi Carlitos desde mi casa, cuando salga del colegio. La llamada tarda y cuando Emilio le pregunta a su mujer sobre ello, esta le contesta que su padre (mi hijo Carlos) no quiere que me llame pues el pasado Domingo parece ser que se llevó un gran sofocón cuando me oyó y se hinchó de llorar. Por suerte para mi, al rato el teléfono suena y puedo oír su vocecita. Después de contarme con aire triste lo que había hecho en el cole y lo que había comido, me preguntó que cuando volvía. Al contestarle que dentro de dos semanas, me dice ¿pero cuanto es dos semanas? Se lo explico diciéndole que iba a verle después de dos domingos mas. Ya no quiso hablar mas, y después de decirme un seco adiós, me colgó.
He recibido por fin el e-mail de Marilu, al que he contestado inmediatamente, y me ha dado mucha satisfacción saber de ella y de todos los míos.
Hoy es un día importante ya que es el momento en que pasaremos el ecuador de nuestro viaje. Hago fotos de la pantalla del ordenador de navegación donde se puede ver lo lejos que estamos de todo.
Mas adelante, cerca del mediodía, brindamos con champán para celebrar este paso del ecuador
Aprovecho también la buena mañana para mandar los e-mail a los amigos a los que se lo había prometido.
Debo decir que la posición en la que tenemos que ponernos para escribir en el ordenador de a bordo no es nada cómoda.
La navegación sigue igual ; viento de mas de 25 nudos y buenas olas. El tiempo es bueno y solo nos caen algunas gotas de chubascos que pasan cerca de nosotros.
Volvemos a hacer mas de 200 millas en las últimas 24 horas. Mas tarde podremos saber que vamos los segundos en nuestra categoría. Lo que no está nada mal para un barco cargadísimo de cosas y equipos `para poder después dar la vuelta al mundo.
Por la tarde el viento baja un poco y Emilio decide que se quite el rizo. El barco lo agradece ya que no solo gana velocidad, si no que además se acopla mejor a las olas que siguen siendo bastante grandes, Intentaré mostrároslas en las fotos adjuntas.
Abrimos los e-mail recibidos entre los que se encuentra uno de Isabel que no ha tardado nada en contestar al que le envié ayer. Yo también le contesto enseguida a pesar que en este momento, el barco se movía bastante Me da mucha alegría saber que hay mas gente que se interesa por mi aventura. In tentaré no defraudarles.Es una pena que no pueda enviar las noticias del Blog hasta llegar a puerto ya que me obliga a trabajar doble. Hoy día uno a las ocho de la tarde cuando vamos a cenar (por cierto que hay habas y a mi no me gustan), he puesto al día lo principal de lo quiero contar y dejo ya de escribir con la espalda dolorida y algo mareado. Hasta luego.
30-11 Noveno día
Volvemos a cambiar la hora retrasando nuestros relojes una hora mas.
La noche ha sido movidita, con vientos de mas de 30 nudos y olas importantes. Menos mal que Emilio lo vio venir, y en previsión de ello, nos hizo coger un rizo antes de que el viento soplara tan fuerte.
Durante la noche en la que nos cayó algún chubasco sin importancia, nos cruzamos con un velero con el “spinaker” puesto. Esto nos sorprendió ya que las condiciones de viento aconsejaban navegar de una forma mas prudente. Emilio conectó con ello por la radio y se trataba del Amaizing Grace, un velero de unos escaso 12 metros de eslora que navegaba a una considerable velocidad. Luego vimos con la clasificación, que seguramente tuvieron problemas pues se estaban quedando muy atrás.
Por la mañana, amaina un poco el viento, pero no baja de los 22-25 nudos, y lo mejor es que sopla en la dirección adecuada para llevarnos directamente a destino. Esto nos hace recorrer muchas millas.(Al mediodía habremos recorrido 204 millas en las últimas 24 horas. Y parece ser que continuaremos así). Esto nos hace prever una llegada a Santa Lucía durante la mañana del día siete.
Estoy esperando impaciente una llamada de mi Carlitos desde mi casa, cuando salga del colegio. La llamada tarda y cuando Emilio le pregunta a su mujer sobre ello, esta le contesta que su padre (mi hijo Carlos) no quiere que me llame pues el pasado Domingo parece ser que se llevó un gran sofocón cuando me oyó y se hinchó de llorar. Por suerte para mi, al rato el teléfono suena y puedo oír su vocecita. Después de contarme con aire triste lo que había hecho en el cole y lo que había comido, me preguntó que cuando volvía. Al contestarle que dentro de dos semanas, me dice ¿pero cuanto es dos semanas? Se lo explico diciéndole que iba a verle después de dos domingos mas. Ya no quiso hablar mas, y después de decirme un seco adiós, me colgó.
He recibido por fin el e-mail de Marilu, al que he contestado inmediatamente, y me ha dado mucha satisfacción saber de ella y de todos los míos.
Hoy es un día importante ya que es el momento en que pasaremos el ecuador de nuestro viaje. Hago fotos de la pantalla del ordenador de navegación donde se puede ver lo lejos que estamos de todo.
Mas adelante, cerca del mediodía, brindamos con champán para celebrar este paso del ecuador
Aprovecho también la buena mañana para mandar los e-mail a los amigos a los que se lo había prometido.
Debo decir que la posición en la que tenemos que ponernos para escribir en el ordenador de a bordo no es nada cómoda.
La navegación sigue igual ; viento de mas de 25 nudos y buenas olas. El tiempo es bueno y solo nos caen algunas gotas de chubascos que pasan cerca de nosotros.
Volvemos a hacer mas de 200 millas en las últimas 24 horas. Mas tarde podremos saber que vamos los segundos en nuestra categoría. Lo que no está nada mal para un barco cargadísimo de cosas y equipos `para poder después dar la vuelta al mundo.
Por la tarde el viento baja un poco y Emilio decide que se quite el rizo. El barco lo agradece ya que no solo gana velocidad, si no que además se acopla mejor a las olas que siguen siendo bastante grandes, Intentaré mostrároslas en las fotos adjuntas.
Abrimos los e-mail recibidos entre los que se encuentra uno de Isabel que no ha tardado nada en contestar al que le envié ayer. Yo también le contesto enseguida a pesar que en este momento, el barco se movía bastante Me da mucha alegría saber que hay mas gente que se interesa por mi aventura. In tentaré no defraudarles.Es una pena que no pueda enviar las noticias del Blog hasta llegar a puerto ya que me obliga a trabajar doble. Hoy día uno a las ocho de la tarde cuando vamos a cenar (por cierto que hay habas y a mi no me gustan), he puesto al día lo principal de lo quiero contar y dejo ya de escribir con la espalda dolorida y algo mareado. Hasta luego.
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